miércoles, 29 de septiembre de 2010

Introduciendo mi veta irascible

Hay algo que me enferma. Se muere alguien, un famoso. Y no pasaron 5 minutos que ya hay 40 páginas de facebook creadas al respecto con 400.000 personas unidas. Qué es lo que mueve al ser humano a crear una página a partir de este tipo de eventos? Cuál es el rédito? Tener muchos fans? Compartir el sentimiento de no poder creer que se murió tal persona con un montón de otros giles que ponen me gusta esto?
En el caso de Romina Yan, que está haciendo furor en estos días, yo me pregunto cuántos de estas personas a las que les gusta eso la recordaban ayer, el mes o incluso el año pasado. Y si bien era joven y tuvo una muerte inesperada, no veo la necesidad de gritarle al mundo que va a estar por siempre en tu corazón (si, claro), hacer un grupo y un fotomontaje de la mina en el cielo con unas alitas e invitar a todos tus conocidos.
Yo lo que no puedo creer y me pone triste, es que haya tanto pelotudo dando vueltas.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Falté a la facu

Apenas entré al subte me encontré con María y tuve un viaje placentero hasta que me bajé en F. de Medicina. Subí las escaleras. El piso estaba cubierto de agua. La gente, amontonada en la boca de la escalera que da a la calle. Me envalentoné y subí, total tenía paraguas.
Mientras subía, pisando despacito para no mojarme las zapatillas (ilusa), ya se podía vaticinar lo que me esperaba cuándo saliera: agua, agua y mas agua cayendo en forma de cortina. A media cuadra ya estaba empapada. Entonces, me frené en el medio del caos de la gente que corría para refugiarse, lo pensé un segundo, di media vuelta y ante las miradas de los que habían decidido esperar, volví al subte. Pero no me quedé con los demás, no. Seguí de largo hasta el andén y me volví a mi casa.
No tengo remordimiento alguno.

martes, 7 de septiembre de 2010

Inexplicable

El otro día vi estos zapatos. Puestos. En una persona, si.
Y no lo puedo entender todavía.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Buenas nuevas

Hasselhoff volvió para quedarse ---->

Reflexiones cotidianas

Fue recién nomás, mientras elegía de entre todas las galletitas unas redondas de arroz integral, cuándo me di cuenta de que estoy desperdiciando mis años de juventud comiendo insípidos productos bajos en calorías. Una mierda. Mal.

domingo, 5 de septiembre de 2010

El spam es un mal que nos afecta a todos

No son las víctimas desprevenidas que día tras día leen y reenvían spam a todos sus allegados. Acá, los verdaderos culpables son las mentes macabras detrás de las cadenas de mails: ávidos usuarios de Powerpoint enviados al mundo con el fin de saturar las casillas de correo creando caos en su población.

Estos seres han descubierto la fórmula del crimen perfecto, ya que sin ningún tipo de escrúpulos, están utilizando como intermediario nada mas y nada menos que a nuestras madres y abuelas, a quienes nos resulta extremadamente difícil pedirles que dejen de lado esta conducta aparentemente inofensiva.

Es por esto que resulta imperativo encontrar a estos parásitos cybernéticos diseminados en los sótanos del globo y terminar con esta locura desde la raíz. El mundo nos necesita.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Un trámite

Me tenía que sacar sangre, y la cosa es que pensaba ir a las 9 de la mañana, entonces mas o menos a las 5 de la tarde empecé el ayuno.
Hoy a las 9 sonó el despertador, me percaté de que estaba lloviendo y en seguida concluí que ni en pedo me levantaba teniendo la opción de acercarme al laboratorio hasta las 4 de la tarde, por lo que seguí durmiendo hasta las 12 y media (si, ya se, soy un cerdo).
La cuestión es que me fui caminando hasta el lugar, que queda en Libertador y Echeverría, y me sacaron sangre, todo pipi cucú. El problema fue cuándo salí de la sala de extracciones y mientras la recepcionista buscaba la orden de la médica que le había pedido para sacar su dirección, empecé a ver puntitos. Un montón. Y de repente, se me nubló la vista, me senté y después NEGRO. De a poco empecé a sentir un sudor frío en el cuerpo y nauseas.
Para cuándo volvió la recepcionista la vista la había recuperado, pero le pedí que me esperara un momentito porque me sentía un poquito mareada.
La chica, que no debe ser ajena a este tipo de cosas, enseguida llamó a la enfermera, quién vino corriendo con un Gatorade que tomé mientras le contaba lo que me había pasado. lentamente me fui recuperando y decidí moverme hasta un desayunador que hay en el lugar y comerme un alfajor que me habían dado antes de sacarme sangre. El tema es que cuándo me paré empecé a marearme de nuevo y me volví a sentar. Entonces, la enfermera llamó a la médica del lugar, que me preguntó que pasaba y me dijo que me iban a llevar a un box. Para ese entonces yo ya había perdido la vista de nuevo y a eso se le había agregado un zumbido que escuchaba de manera constante.
En ese momento pensé que me iba a desmayar y tenía mucho miedo de despertarme en alguna cínica desconocida, pero por alguna razón, cuándo un tercer enfermero me sostuvo las piernas en alto para que me subiera la presión, mi foco pasó a ser un agujerito que tengo en la media y qué vergüenza si se veía (¿?). Mientras, la otra enfermera me tiraba aire y la médica me tomaba la presión y yo me sentía una pendeja de mimada.
De a poco fui recuperando la compostura (si, ahora tenés mas colorcito, me dijeron) y después de comerme el alfajorcito y tomar un poco mas de gatorade, me dejaron ir bajo la promesa de volverme en taxi a casa. Y eso hice, pero hasta lo de mi mami, que me recibió con una banana en la mano (tomá, comé esto que tiene potasio).
Y así concluyó mi aventura del día de hoy. Resulta que me pasé con el ayuno y me bajó el azúcar, y por eso todo el circo de la visión (o falta de ella). Un bajón.

Y no, no me da miedo sacarme sangre lo juro y lo recontra juro.